google2fe1c6f792688070.html

Vivimos en una época de cambio, se generan nuevas situaciones que afectan prácticamente a todas las áreas de nuestra vida. Unas van dirigidas desde el individuo y otras desde las autoridades y cambian de un día para otro, cambian las normas, cambia el modus operandi y esto nos causa inevitablemente una agitación interior que deriva en cambios en nuestra vida, llegando a tocar el tema de la educación de nuestros hijos.

En una ocasión, mientras hablaba con una familia sobre nuestra educación en casa, me preguntó abiertamente si no era demasiada responsabilidad hacernos cargo de la educación de nuestros hijos. En ese momento no pude responderle como lo haría hoy porque en mi se generó una profunda reflexión: Si la educación de mis hijos no es responsabilidad, ¿a quién le pertenece?

Finalmente, no puede llegar a otra conclusión que, debido al mismo sistema educativo-social en el que hemos crecido y, por lo tanto, bajo el que nos hemos/han educado, estamos acostumbrados a delegar la responsabilidad de nuestra vida al afuera, a los gobiernos, a la industria alimenticia, a las farmacéuticas…. pero la sorpresa es que ahora que estamos viviendo globalmente la educación de nuestros hijos y tantas cosas cambian en nuestra vida, comienzan a abrirse nuevos horizontes que van abriendo pequeñas ventanas.

Así que vengo a contarte que sí, que la educación de nuestros hijos es responsabilidad nuestra. Bajo mi punto de vista, eso no implica sentarme cada día con ellos para que rellenen varias páginas de ejercicios, sino que implica estar atenta, observar y detectar las necesidades individuales de cada uno y facilitarles el desarrollo en ese área. quejándome del sistema no voy a conseguir mucho, responsabilizándome, cambiando la forma de hacer las cosas es seguro que cambia el resultado y, además, una de las  cosas que mis hijos van a aprender, a parte de las comunidades autónomas de España, es que ellos también son dueños de su vida.

Personalmente el foco no lo pongo en lo que se supone que «tengo que enseñarles» ni en lo que se supone que «tienen que aprender » sino en lo que pueden encontrar a su alrededor.